Nom_Aid: Construcciones en base a microalgas, una opción sustentable para mejorar el entorno y mitigar el CO2 en Santiago.
Actualmente es común observar un acelerado estilo de vida, atribuible a un urbanismo determinado por el flujo, la eficiencia (Tapia, 2004) y al modelo neoliberal, dando lugar a una sociedad cada vez más competitiva y menos comunitaria (Bauman, 2000).
Chile no es la excepción, siendo el segundo país más individualista del mundo de acuerdo a su actuar en sociedad (Zunino, 2011). Esta realidad se vuelve alarmante cuando se entiende que este estilo de vida conlleva un elevado consumo energético que genera consecuencias medioambientales a nivel mundial.
Desde el comienzo de la era industrial a mediados del siglo XVIII en Gran Bretaña, se han liberado 375.000 MMT de CO2 al medio ambiente, cuyo resultado es el cambio climático (OMM, 2011). Aparece entonces la necesidad de fomentar proyectos sustentables ante la preocupación global por los desastres naturales colaterales observados hoy y, en especial, por los que se heredarán a las futuras generaciones (Schwab, 2013).
Chile aporta un 0,03% del CO2 liberado a la atmósfera y se ha comprometido a reducir el 20% de sus emisiones de aquí al 2020 (MAPS-Chile, 2013), siendo Santiago uno de los principales responsables del país con una emisión total de 9.457.399 toneladas de CO2 (Carbon Disclosure Project, 2013), visualizándose la oportunidad de generar soluciones de innovación que se hagan cargo de esta problemática. Se propone, en consecuencia, el diseño de construcciones en base a microalgas capaces de adaptarse a un entorno edificado, presentándose como una opción eficiente, eficaz y viable de mitigación de CO2. Su desarrollo se efectúa a partir de un diagnóstico perceptivo del entorno, herramientas de modelación digital y una metodología basada en la biotecnología para la obtención de cultivos inteligentes de microalgas, dando como resultado un ambiente verde, aire purificado y nuevos espacios en una ciudad determinada por construcciones ya existentes.
